Ayer terminará mañana

Una pintura de achiote en la pared de la cueva es la memoria de los hechos. Ha estado allí durante siglos como un grito de color rojo que lucha por volar más allá del Peñón de Sutatausa. Son trazos hechos con la ira de los derrotados y en ellos se ven cuerpos que caen de las alturas. Los dedos pintados de Chaicu dibujan la escena que le consume el corazón. En un lugar de otro tiempo, el pequeño Víctor delinea en el papel unas figuras extrañas que le salen de muy adentro de su alma. El cielo es azul y sobre el abismo vuelan unas mariposas. El pasado avanza hacia el vacío. La dignidad de los pueblos indígenas que habitaron la región de Tausa, Suta y Cucunubá los lleva a una muerte transitoria. Miles de cuerpos darán el paso que los liberará del sometimiento a los encomenderos. Mientras tanto el mañana viene en su busca. Las manos cubiertas de achiote tocan las manos frágiles de Víctor y se encuentran en el viento que agita el gran peñón. Ayer terminará mañana es la obra delicada de Santiago Sepúlveda sobre la que ha reflexionado durante años. Un juego de tiempos y hechos que viajan de una época a otra, del pasado al futuro, como un hilo invisible que une a los hombres con sus antepasados. Una bella novela escrita con la fuerza de quienes marcaron las piedras con pinturas de denuncia y con la ternura del que hereda una causa y decide dotarla de poesía. Juan Diego Mejía

Autor: Sepúlveda Montenegro, Santiago José

Precio: $35,000